Concurso de ideas para construcción de viviendas protegidas para jóvenes en Cerro Muriano, Córdoba. 2008
Organizador: Provicosa (promotora provincial de viviendas de córdoba s.a.
Autor: M. Noguera, A. Altarriba, G. Guimaraens
Miguel Noguera. Arquitecto
Miguel Noguera. Arquitecto
¿Cómo deseas vivir?
Sobre la imagen del conjunto.
En un proyecto donde parece inevitable la monótona seriación de un tipo, se ha procurado generar una imagen de conjunto generada a partir del tipo base que apele al recuerdo, como podría ser la del poblado andaluz, de clara raíz árabe, caracterizada por el apiñamiento de níveas arquitecturas prismáticas que se ha repetido en la tradición, incluyendo los intentos poblacionales de posguerra.
Pero la imagen azarosa resultante surge de un sencillo movimiento que se traduce en el desplazamiento de un módulo de la vivienda sobre el patio principal respondiendo a unas necesidades funcionales, y enriqueciendo las necesidades simbólicas de las fachadas, que traducen el movimiento de formas en música a imagen y semejanza de la música andalusí.
Sobre el concepto de la vivienda.
Se trata de ofrecer una vivienda económica, que busca la calidad espacial y el ahorro energético a partir del aprovechamiento de recursos; apelando a la sabiduría del tiempo y no al despilfarro tecnológico.
La idea no es producir para el consumo innecesario, sino aprovechar aquello de lo que se dispone para fijar el consumo responsable de los bienes vitales. Del mismo modo la tectónica del edificio, persiguiendo la economía y la adecuación, busca en los materiales tradicionales convencionales su propia razón de ser.
Como en la arquitectura vernácula, nuestra arquitectura debe saber aportar luz y arrojar sombra, controlar el aire para ventilar y aclimatar las estancias sin menoscabar el confort, proteger del agua, al tiempo que garantizar su control como sistema de refrigeración o producto de consumo…
Pero la vivienda también debe saber aportar un bienestar psicológico al habitante, que tiene que ver con la elección de un modo singular de vida, con la apropiación del lugar y del recuerdo y con la simbiosis de todos aquellos efectos reconfortantes vinculados a la fusión con la naturaleza, a partir de los sentidos: la vista, captando panorámicas, formas, luces y colores; el olfato y el sabor, degustando los aromas y los sabores; el tacto, palpando las texturas; el oído, que sutilmente recibe el silbido del viento, el murmullo de las hojas, el fluir del agua, el trinar de las aves…; y, finalmente, la cautivadora sensación del recuerdo, que se transforma en significados o símbolos, a partir de la percepción, y que hace de la vivencia de la arquitectura una experiencia única para el habitante.
El patio: luz, aire y agua
Esencia de la arquitectura tradicional meridional, se convierte en elemento clave como lugar de paso o reunión aportando la adecuada iluminación a las estancias y al mismo tiempo, controlando las ventilaciones. La luz penetra en el mismo tamizada y el aire se refresca y aromatiza con la vegetación vertical que trepa por sus arriates.
En la base del patio se ubicará un gran aljibe, al modo tradicional, que recoge el agua de lluvia que cae sobre el pavimento o proviene de las cubiertas, pudiendo ser ésta reaprovechada para riego o limpieza. Siempre sería posible la incorporación de una unidad de tratamiento de aguas que la hiciera válida para otros usos.
Las viviendas, admiten ventilaciones cruzadas gracias a la inserción del patio, presentando en todos los casos doble orientación. Todos los estares se orientan a Este, mientras que los dormitorios disponen siempre de doble orientación, donde una de las cuales siempre es o a Este o a Sur. La luz del sol estival, siempre se introducirá tamizada, generando una reconfortante sombra sobre el patio en las horas de mayor calor. El espesor del tratamiento murario del perímetro edificado, y el hermetismo de la fachada, facilitan que los muros que mantienen el frescor diurno de la vivienda, por efecto de la inercia térmica, caldeen suavemente las dependencias llegada la noche.
El patio: personalizando la vivienda
El módulo de cocina en planta baja y dormitorio en planta primera, puede deslizarse a través del patio, conformando tres posibilidades de vivienda, con un gran patio, con dos patios equivalentes, uno más privado y otro más público; o con un patio mayor público y otro menor de servicio. La idea es responder con este movimiento a diversas necesidades de vida en función del esquema familiar.
PATIO DE RECEPCIÓN PÚBLICA-PATIO DE JUEGOS DE NIÑOS
UN ÚNICO PATIO ARTICULADOR
UN ÚNICO PATIO PARA GRANDES REUNIONES AL AIRE LIBRE
PATIO PÚBLICO-PATIO DE REFLEXIÓN Y RETIRO
PEQUEÑO PATIO TENDEDERO-GRAN PATIO PÚBLICO O PARA DIVERSAS ACTIVIDADES
Y OTRAS POSIBILIDADES PERSONALES QUE SE DEBATAN ENTRE LO DOMESTICO-PÚBLICO Y LO PRIVADO…
Sobre la Nuba Andalusí
«…estoy ebrio sin vino,
triste y lleno de deseo,
extraño en estos lugares.
¿Volverán a ser felices nuestros dias y nuestras noches
a la orilla del mar?
¿Gozaremos de la brisa perfumada,
almizcle de nuestras casas,
y la belleza acaso se aprestará
a saludarnos,
mientras árboles frondosos, esbeltos, bellos
cubrirán el jardín con su sombra?
El agua fluirá,
y las hojas de mirto, flotaran o se hundirán»
IBN ZUHR “el nieto” . Nuba de los Poetas de Al-Andalus
Se dice de la Nuba Andalusí que se componía para ser interpretada en una hora concreta del día, con una función terapéutica para el espíritu humano, tratando de alimentar su estado anímico, ya fuera lánguido en el momento del atardecer, de agradecimiento con el lucero del alba… Del mismo modo las fachadas y sus significados responden a una orientación que, evidentemente, se traduce en diferentes matices de exposición al paisaje, a la luz del sol, al aire y al color del cielo en función de la hora.
Las Nubas constituían un repertorio de transmisión oral que se encadenaba en función del modo y el ritmo como las “cuentas de un rosario” de la misma manera que se compone este conjunto de viviendas.
Destaca también el carácter intercultural de la nuba, reflejo de una sociedad integradora, donde los poetas escriben en diversos idiomas o adaptan melodías de otras culturas.
NUBA08
Así, si la nubas, además de cantar el amor cortesano, las alabanzas al profeta, o la nostalgia del desterrado, cantaron a los jardines de Al Andalus en las noches de jazmín y azahar, adormeciendo los patios de Córdoba, Sevilla y Granada, ¿por qué ahora una arquitectura de jardines y patios no evoca aquellos espacios que hacían amable la luz del sol, enternecían la sombra de la luna o se perfumaban con las esencias más fragantes, significando a su vez aquellas melodías que los cantaron?
Sobre los arriates coloreados: el homenaje a Ziryab
Como homenaje a Ziryab, el célebre músico andalusí, que incorporó una quinta cuerda al laud, cada nota de las fachadas, que se corresponde con un parterre vegetal coloreado por las flores en primavera, se tinta de la simbología cromática que adoptaron las cuerdas del instrumento en aquel entonces. Así, la primera, que simbolizaba la bilis, se teñía de amarillo, como la flor del jazmín silvestre, la segunda, simbolizando la sangre, de rojo, como la rosa del rosal trepador; la tercera, la flema, blanca, como la flor del jazmín morisco; el bordón, o cuarta cuerda, se teñía de negro color simbolizado con la espesa hiedra ensalzando la melancolía. La quinta cuerda, añadida por Ziryab, estaba teñida de rojo, y se colocaba entre la segunda y la tercera, representando el alma, y permitiendo al laud nuevas posibilidades expresivas, la cuerda de Ziryab se representará con la flor rosada de la buganvilla.